Cuando era pequeñito, pensaba que los Oscars eran otorgados por un paí­s muy importante a gente que hací­a grandes pelí­culas. Siendo ya chavalote, pensaba que los Oscars se regalaban entre amiguetes de Hollywood atendiendo a razones de carácter económico y no artí­sticas. Ah, y ya sabí­a que la ceremonia se realizaba en Estados Unidos. Hoy ya, algo más talludito, he llegado a la conclusión de que los Oscars se regalan sin criterio alguno en un paí­s de locos. Tampoco es que las ediciones anteriores le den crédito alguno, pero es que parece que lo hacen a posta. Sino que alguien me explique esto:

Babel: 7 nominaciones.
Santa madre de Dios, pero si es un bodrio infumable. Joder, si es que está hasta mal hecha. Lo dicho, sólo apta para pseudoculturetas.

El laberinto del fauno: Nominada a la mejor pelí­cula de habla no inglesa.
¿Quéééééééééééééééééé? Por favor, sostenedme, que me desmayo.

Volver: Ausente.
¿Ein? Pero si estos yankees majaras no han visto una pelí­cula tan buena en los últimos 10 años.

Sólo echa uno de menos que la ceremonia la presentara Iker Jiménez. Creo que es lo único que le faltarí­a para ser completamente delirante.

😯

Hay 6 comentarios

  1. jueves, 25 de enero de 2007 a las 11:18

    No he visto las otras dos pelis, y la verdad es que no tengo excesiva prisa por verlas, pero… una de las cosas que hace tan buena «Volver», al menos para mí­ que conozco bien la vida en los pueblos de La Mancha, es que todo es exactamente ASí. Es clavado a la realidad…
    Cuando yo era pequeña pensaba que los Oscars eran figurillas de chocolate envueltas en papel de oro, con eso te lo digo todo…
    Besos!

  2. julio
    jueves, 25 de enero de 2007 a las 13:02

    De acuerdo contigo en Volver y en Babel (Esta es la peli,mas cuadriculada y mas forzada de mucho tiempo,sin nada creí­ble, ñoña y a ratos te mueres de verguenza ajena).

    En desacuerdo con el Fauno. Es un cuento lleno de ideas y sugerencias, muy bien rodado y muy bien contado. A mi pareció que nos mostraba la terrible posguerra nuestra, de una forma mucho mas verdadera de lo que nos habí­an contado hasta hoy, tanto en cine como en literatura.

    En fin, nunca llueve a gusto de todos. 😀 😆

  3. sábado, 27 de enero de 2007 a las 10:53

    Buenas!

    Hombre… sinceramente a mi me parece que tenemos un tanto sobrevalorado a Almodovar… no le quito mérito en sus pelí­culas pero me parece que se ha inflado en exceso el globo de su buen hacer.

    Por otro lado, la del fauno… según he visto y leí­do por ahi… tiene unos efectos muy trabajados, de hecho una «famosa» empresa americana de efectos estubo contactando con la de la peli del fauno para empaparse de lo que habí­an hecho y como , porque alli ya están obsoletos ya sólo hacen efectos de ordenador… lo de currarse los trajes y el decorado ya lo han perdido.

    Taluegoytal!

  4. sábado, 27 de enero de 2007 a las 18:52

    Como muy bien dice Julio, nunca llueve a gusto de todos.

    😀

  5. lunes, 29 de enero de 2007 a las 01:17

    Aunque me falta por ver una de las pelí­culas que mencionas, estoy absolutamente de acuerdo contigo. Incluso en lo de Iker Jiménez 😆

  6. martes, 30 de enero de 2007 a las 00:50

    Bueno, Helena, yo con lo que estoy más de acuerdo conmigo (algo no demasiado habitual) es precisamente en lo de Iker Jiménez.

    Un besote, maja.

    😀